Polvorones o bouche de Noël?
Aggiornamento: 3 gen 2021
Entrevistas mini size sobre la Navidad en Occitania, Baviera y Asturias.

Quiero empezar este artículo navideño hablando de algo que nos concierne a todos. Durante el aislamiento, cuando no podíamos salir de casa, hemos brindado por cumpleaños en línea, abrazando el ordenador, descubriendo que no podemos estar solos y también lo difícil (y necesario) que es mantener relaciones a distancia.
Eso es lo que muchos viven cotidianamente: hay viajadores, los extranjeros de la vida, los que nunca se van en bici porque siempre cogen el avión. Se van con la mochila, andan, llegan y se van otra vez, como en un ciclo magnífico. Cada uno que se mueve así “deja” en el mundo todas las caras que ha encontrado y los desconocidos que se han convertido en amigos. ¿Cómo vencer la distancia y la melancolía? Haber aprendido algunas lenguas me ha permitido tener amigos en todo el mundo; no son pen pal, los he abrazado a casi todos.
Alejándonos de nuestra propia idea de “Navidad”, ¿estamos todos de acuerdo con lo que es una buena ocasión para pasar el tiempo con los que amamos? Yo lo hice así: llamé por video a algunos amigos al extranjero y les pregunté cómo habrían pasado la Navidad. P.D. Como nos enseña el estereótipo de la “chica italiana”, les pedí el menú tradicional, pero he quemado demasiados bizcochos para adentrarme en este tema.
SJ y Mili, las hermanitas francesas. Nos conocimos desde hace casi siete años. Viven en un hermoso pueblo al sur de Francia y, hace pocos días, descubrí que su manera de celebrar la Navidad no es tan diferente de la nuestra. La “típica familia francesa” hace el pesebre, adorna el árbol de Navidad y cree en Papa Noel. El 24 de diciembre es el día de la gran cena, de los regalos, de los juegos de sociedad y de la misa de medianoche. Así como nosotros nos dividimos en “Panettone” y “Pandoro”, ellos se dividen en “team pescado” y “team carne” por la noche del 24, que es la verdadera fiesta en familia, porque el día 25 está casi siempre reservado a excursiones y visitas a los amigos. Quien come pescado, generalmente escoge sándwiches con caviar y salmón ahumado, seguidos por un plato único de mariscos y ostras, acompañado por las patatas duquesas (puré de patatas horneado). Quien prefiere la carne, en cambio, empieza con sándwiches y foie gras (hígado de pato) seguidos por pavo con castañas. No obstante el menú, nunca faltará “la bouche de Noël” (tronco navideño) y los “trece desserts”: frutos secos, quesos, dulces y mandarinas. Durante las vacaciones, es algo común pasear por las calles de la ciudad bebiendo el vin brûlé: Mili y SJ me prometieron que iremos juntas a ver las luces navideñas: ¡cruzo los dedos para el proximo ano!
Adrian, orgullosamente bávaro. Lo conocí en el feliz periodo de mi vida en el que pensaba que habría aprendido el alemán: solo sé decir “Hallo” e “Ich bin Benedetta”, por eso siempre hemos hablado en inglés. Subrayó que se habla de “Navidad en Baviera” porque en el resto de Alemania hay otras tradiciones. Sufrí en escuchar que los jóvenes alemanos transcurren la mayoría de las vacaciones estudiando...somos todos los hijos de los exámenes. El 24 de diciembre se transcurre en familia: las celebraciones empiezan en la tarde, cuando la gente sale para ir a escuchar los conciertos de Navidad. Todos vuelven a casa para cenar juntos: ensalada de patatas, chorizo bávaro o austriaco, diferentes tipos de carne, chucrut, pan y cerveza. Después, en casi todas las casas, los niños suben al piso de arriba para jugar, mientras que los adultos preparan la “sala del árbol”. A medianoche, los niños bajarán las escaleras y la puerta se abrirá mostrando el árbol luminoso y los regalos. El 25 de diciembre se celebra yendo a misa y después a comer juntos, o transcurriendo el día fuera para volver tarde y cenar en familia.
María, ahora su italiano es mejor que mi español. Nos hemos buscado y nos hemos encontrado, literalmente: ella, estudiante de idiomas, buscaba a alguien con quien practicar el italiano, y yo una persona con quien hablar en español...me gustaría ir pronto a verla en Asturias, por el momento trato de conocer su cultura. La cena del 24 de diciembre y la comida del 25 se transcurren con los parientes: los platos tradicionales son el pavo y el embutido de Navidad; los dulces tradicionales son los polvorones, los turrones, los mazapanes y la fruta escarchada. También los españoles creen en Papa Noel y, la noche del 6 de enero, reciben la visita de los Reyes Magos. De eso deriva el roscón de Reyes, una tarta en la que hay una faba y un regalo: quien encuentra la faba pierde, quien el regalo, gana. Me divirtió descubrir que, así como nosotros, en Nochebuena los enamorados españoles se dan un beso bajo el muérdago, pero mucho más escuchar la tradición de las uvas. De hecho, durante la cuenta atrás del 31 de diciembre, todos tienen que comer una uva por cada campanada.
Se dice que quien llegará a comer todas las uvas a tiempo, tendrá suerte por todo el año. Good luck y... ¡feliz Navidad!
Articolo a cura di: Benedetta Pitocco